sábado, 27 de diciembre de 2014

The Equalizer

“El Justiciero” marca el reencuentro del director Antoine Fuqua y el gran Denzel Washington 13 años después de “Dia de Entrenamiento” aquel crudo y duro policial que le valió a Denzel su segundo Oscar. Este filme está basado en una serie televisiva de finales de los años ochenta del mismo nombre y que se caracterizaba (en ese entonces) por su violencia explícita. 

Aquí Denzel interpreta a Robert McCall un amigable y algo solitario trabajador de una inmensa tienda de departamentos (del tipo Ace Home Center o Maestro) pero nada es lo que parece, un gran acierto en la dirección de parte de Fuqua , nos va mostrando en un primer tramo rasgos de la personalidad de McCall, un tipo metódico, ordenado, que cronometra su tiempo y que siempre está al tanto de todo lo que le rodea y sufre de insomnio
(por lo que puede intuirse que es una persona que tiene un pasado y trata de dejarlo atraz), para despejarse un poco McCall va todas las madrugadas a uno de esos restaurantes que abren las 24 horas a tomarse un vaso de té(de un sobre que maniáticamente envuelve todas las noches antes de salir y mete en su bolsillo) mientras lee un libro, es en ese lugar en donde entabla amistad con Teri(Chloë Grace Moretz) una joven prostituta de lujo con sueños de una vida mejor a la que no puede acceder debido a que le pertenece a una mafia rusa. A la siguiente noche Teri no volverá a aparecer en el restaurant, McCall averiguara que ha recibido una tremenda golpiza que la ha dejado en un hospital y en una algo extraña decisión se dirige(desarmado) hasta el lugar donde está el proxeneta de Teri y le ofrece comprar su libertad. Obviamente el proxeneta que en ese momento se encuentra con 05 de sus guardaespaldas se burla de McCall lo humilla y le dice que se largue, McCall mira a un costado, mira al otro y finalmente mira su reloj y calcula que tan solo le tomara 16 segundos matarlos a todos, se lamenta de la decisión del ruso, reinicia su cronometro y si, los mata a todos. 
No soy muy fan del cine de Antoine Fuqua, salvo “Training Day” (quizás su mejor filme) el resto son solo trabajos de un artesano efectivo que sabe moverse muy bien en el campo de acción, antes que un autor a tomar en cuenta, King Arthur, la horrible Tears of the Sun, Shooter y la ultra exagerada Olympus Has Fallen son una clara muestra de que lo suyo son las balas y explosiones antes que contar una buena historia. En ese sentido con “The equalizer” no decepciona pues la película en su segunda mitad es acción imparable al estilo de la vieja escuela y que si uno está de ánimo puede disfrutar como un niño amen de la como siempre excelente actuación de Denzel Washington y su McCall tan ególatra que no se molesta siquiera en tener nunca un arma a la mano para enfrentarse a sus enemigos (para qué? Si el muy maldito puede matarte con un sacacorchos o un libro de Hemingway) pero McCall no puede llevar todo el relato en sus hombros así que para elevar aún más la cuota de acción entra en escena un villano tan bastardo como carismático que pueda hacerle algo de competencia en pantalla y ese es Tedy(Marton Csokas) quien es enviado por los rusos a solucionar las cosas, se nota que tanto Csokas como Washington se lo pasaron de lo lindo en sus respectivos papeles y ambos captaron toda mi atención e hicieron que disfrute del resto de la historia que lamentablemente pierde toda la atmosfera intrigante inicial y sigue hacia adelante sin sorpresas o alguna vuelta de tuerca que reavive el interés pues uno ya sabe cómo es que van a terminar las cosas. Para mí es un desperdicio la participación de Chloë Grace Moretz quien simplemente desaparece de la historia y Fuqua se limita a presentar las secuencias una detrás de otra sin tomar en cuenta que hacen inverosímil al personaje principal, cualquier otro actor hubiera terminado haciendo el ridículo, no sé qué hubiera sido del filme sino fuera por Denzel Washington. 
Es ese personaje que Denzel elabora el que tiene ese por decirlo así encanto nostálgico de personajes como John McClaine, Rambo o el mismo Terminator, que uno ha seguido a lo largo de tantos años y con los que a disfrutado(y mucho) en la pantalla grande, Denzel con sus pausas, largos silencios y miradas, le pone personalidad, carácter, nervio y a su personaje al límite de la ley, de esos que le podemos perdonar el salir ileso luego de enfrentarse a una docena de mafiosos o tumbarse él solito a un mafia completa(SOLITOOOO!!!!) Robert McCall se pone en la lista de esos anti-héroes que uno se queda de ganas de volver a ver impartiendo justicia y pateando traseros, pero bueno al parecer no habrá que esperar mucho pues debido al éxito la más que cantada secuela ya se encuentra en etapa de producción.

HARRYFOCKER LE DA 7/10

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