G.I.Joe: The rise of cobra

Navidad del año 1990, no creo equivocarme, fue en la navidad de ese mismo año cuando mi madre me regalo un muñequito articulado llamado STALKER que venía en una cajita que decía G.I.Joe, tenia de todo el muñequito del demonio: su ametralladora de plástico, su cuchillo mantequillero estilo Rambo, su pistolita automática, su mochila con forma de salvavidas, granadas, remos, su bote kayak, quería tanto al maldito muñeco que nunca perdí ninguna de sus diminutas piezas, si se me perdía alguna revolvía la casa hasta encontrarla y amenazaba de muerte a mis padres si cometían el sacrilegio de pisar alguna. Fascinado por el muñequito infernal y por saber de su origen fue que un día en un algo extraño puesto de revistas vi entre un montón de revistas en cuyas portadas había mujeres de pocas o nulas prendas con extrañas expresiones en sus rostros y que decían solo para 18(¿que serian revistas de moda o esas aburridas vanidades de mi madre?)perdido en un rincón estaba un numero de G.I.Joe, un comic que coleccione hasta que dejo de ser traído al Perú(maldita sea dejaron de traer el comic justo cuando me iba a enterar quien era el asesino del maestro Regio, el maestro de Snake Eyes y Storm Shadow, hijos de un huracán de p....) claro que para ese momento tenía más de una docena de muñequitos(mi favorito era Snake Eyes YO JOEEEEE) y aunque no se comparaba con la colección de mis compañeros de clase( había un gordo grasa, bien trolazo que tenía más de 70 con tanques y bunker de Cobra incluido) no podría negar que fueron un momento muy divertido de mi adolescencia, juguetes que aún conservo y NUNCA, NI EN UN MILLON DE AÑOS le daría a mi hijo pa que juegue, primero muerto( si es que llego a tener algún engendro claro). No puedo negarlo fui fanático de los Joe, mas del genial comic, que de la inocentona serie de dibujos animados porque en el comic al menos se morían algunos Joes y Cobras(aunque cada vez que se moría uno, en el siguiente numero aparecían 10 más para reemplazarlo) y la trama era muy buena, con un desarrollo sostenido de la historia de los personajes, connotaciones políticas y una alta dosis de realismo y drama, antes del ya trillado discurso de: “nosotros los soldados americanos somos INVENCIBLES”.
Siendo tan fanático del comic y teniendo un grato recuerdo de mis tardes batallando por el dominio del mundo en mi cuarto con mis muñequitos(recordando que en aquella época o me ponía a jugar o miraba en la tele “Carmín” o “Natacha”) lo último que quería hacer era ver la película, ya intuía que iba a ser mala, de solo mirar el casting, a los guionistas y al director, ya lo suponía, pero cedí a mi curiosidad y la vi ¿porque lo hice maldita sea porqueee?.... sentimientos encontrados en una fría noche de otoño.
“G.I.Joe, es una película concebida por Hasbro y Bonaventura pictures con el único objetivo de vender juguetes. De hecho la película debió ser lanzada en el 2005, junto con un batallón de muñequitos, pero fueron pospuestos por otro producto que los mismos productores encontraron aun más redituable “Transformers”. Luego de las demenciales cifras conseguidas en juguetes, videojuegos y un larguísimo etc. Los productores apuntaron por un nuevo éxito en ventas (lo de menos tenía que ser la película) y para eso recurrieron a un hombre que a pulso se está ganando el titulo del “Michael Bay del nuevo milenio” Stephen Sommers.

Sommers, director de “The mummy” y “Van Helsing”, confirma con G.I.Joe, que lo suyo es despreciable cine “pop corn” para el olvido, una de esas actuales mentes brillantes del cine hollywoodense que piensa que 45 minutos de efectos computarizados son suficientes para compensar 20 minutos de diálogos patéticos y un guion tan simple que hace pensar que un capitulo de Bob Esponja tiene mucha más profundidad en la historia.
Si haber elegido a Sommers como director no fue buena idea, todo sigue cuesta abajo en la elección del casting, si la idea era hacer de la película un ridículo impresentable, entonces fue muy sabio convocar al insoportable Marlon Wayans o al confundidisimo Dennis Quaid (¿que hago aquí? ¿General shooo?), por mencionar solo un par de nombres de los que solo se pueden resaltar al que interpreta a Snake Eyes (que esta genial porque en toda la película no dice ni una sola línea) al gran actor coreano Byung-Hun Lee como el enigmático Storm Shadow, a Joseph Gordon-Levitt, quien sin hacer mucho se deja sentir interpretando al futuro general Cobra y Arnold Vosloo, que configura un intolerable “Zartan”.

Como ya es usual en Sommers, él es quien forma parte o escribe en su totalidad el guion de sus películas (así que no puede quejarse de que uno le echa toda la culpa por las puras), en este caso “Rise of cobra” es un guion demasiado simple, demasiado esquemático, echo para presentar personajes uno tras otro como si de juguetitos próximamente a la venta se tratase (¿pero que estoy escribiendo si de eso se trata exactamente?), la cosa es bien simple:

El mundo está en peligro, hay un comando de súper agiles soldados con lo ultimito en tecnología, dispuestos a salvar a la humanidad del villano de turno, aparece el villano, que tiene aun mas tecnología que los muchachos(es que este malo compra sus cachivaches en EBAY), primer round, a los Joes les dan tas tas en el trasero. Segundo round, los Joes, les dan de alma a los viperinos enemigos de turno y el tercer round, tendrá que verlo usted en la inminente segunda parte.

¿Pero es en realidad tan mala “Rise of cobra”? Siendo sinceros, tan mala no lo es, si hay algo que extraña es que a pesar de que la película sea contada con vertiginosa velocidad, es que la película no tenga mucha acción, suena raro, pero es así, hasta la espectacular( y de lejísimos lo mejor de la película)secuencia del combate en las calles de Paris, que es más o menos luego de 45 minutos de metraje, no hay secuencia de acción digna de mención, la batalla final es un despropósito, que ha sido duramente criticado por lo increíble e ilógico de la secuencia (un imposible combate en la profundidades del mar del círculo polar ártico), pero los primeros 45 minutos son entretenidos, sin proponérselo Sommers va desarrollando una a una las historias de los personajes de la saga, remarcando de manera algo exagerada la historia aparte entre Snake eyes y Storm Shadow, eso aunque le da algo más de interés a una inminente segunda película, juega en contra del factor diversión+entretenimiento de la misma, pero que no le quita ritmo al visionado de los Joes, es cuando el intelecto de Sommers quien al parecer al no saber a ciencia cierta si le dejarían hacer una segunda parte(para mí que no)se decide a solucionar sus película y acomete salvajemente contra los protagonistas y en 20 minutos soluciona la película entera( resulta que tal había sido hermano de esta y esta era la esposa de este, pero claro este quiere dominar el mundo y el otro, sin querer lo había dado por muerto y blablabla) en medio de esa confusa e irreal batalla final, 20 minutos desastrosos que hacen de “Rise of cobra” una experiencia lamentable.



Lo mejor de la película está en que si vas a verla solo por ver a Snake Eyes, vas a salir más feliz que nerd del colegio luego de conseguir cita para el baile de promoción ( Y ES MUJERRR y no es su MAMAAA) Snake Eyes, esta excelente, fue una nostalgia increíble verlo robándose la pantalla en cada una de sus apariciones, sobre todo en la secuencia de Paris, todo un placer para los ojos ver como la torre Eiffel, se hace mil pedazos, Cobra tampoco está del todo mal.

Lo peor de “G.I.Joe está en todo lo demás, ni siquiera verle las bubbies a Sienna Miller son excusa suficiente para aguantar su falsa interpretación (Melania Urbina lo hubiera hecho mil veces mejor).

Lo remarcable está en que ya sabes con exactitud que es lo que se te viene, cuando el nombre Stephen Sommers salga en la pantalla con los créditos.

HARRYFOCKER LE DA 4.5/10